«Que bien te sientan las copas que me tomo»
El Sigalas va mirando de verde;
verde de todas las noches azules,
blanco del verte que se hace de noche.
Va Sigalas siseando sesiones,
y entre la lengua y el aire un segundo
de lenguas que se cuecen juntas, vivas.
Mira. Habla. Ríe con ganas Sigalas;
tu risa anima la turbia mañana
que ya nos coge pensando en dejarla.
Ve más allá, el Sigalas, aunque dude,
sabe de ondas que en sombras laminadas,
ve de brillos que efímeros se esconden.
El Sigalas va, siendo desde lejos,
desde el frío que le viene apretando;
desde el arabesco de su piel bruna.
Pasa el Sigalas, muy suyo y armado
del sedimento que supura el mundo
de la huella que deja libre la vida;
son del Sigalas las sílabas raras,
entremezcladas de acentos convexos:
son del Sigalas todas las «sigalas».
Imagen: The Brand, Saga; Brian K. Vaughan y Fiona Staples.