Cosas que pretendo hacer cuando esto se acabe:
Correr como si loco sin rumbo y sin sentido, que me dé fuerte el aire, que me ciegue la lluvia.…
Cosas que pretendo hacer cuando esto se acabe:
Correr como si loco sin rumbo y sin sentido, que me dé fuerte el aire, que me ciegue la lluvia.…
A un negro que sentado en lunes sonreía. A un negro solo y flaco que rasgó mi desgana. A ese negro fumando y su saludo amigo.…
Ha salido el coyote, enfangado otra vez en los fuertes aromas de la tierra nocturna, ha salido en silencio, mirando a la frontera, y ha visto la frontera llenarse en barahúnda, sus praderas repletas, sus rincones completos en la revuelta febril de la sombra aluda.…
Azul: todo es de color donde todo nos vale, hasta reírse de ti, reírse de todo: reírse sumergido, con el mundo soldado.…
Ya sé que no me leen ni los cuervos aludos, ni las cuatro holoturias pintadas de antracita que glaucas se reflejan bajo el agua, mirándome.…
Tú. Tú eres el volcán, de núcleo licuado circulante y magnético que mantiene conscientes todas las efusiones, corrientes explosivas, subterráneas venas transfiriendo patrones de noches y de vidas, remontando humedades en la sombra del cielo.…
Estás como en verano, como yo recordaba, como debieras estar, entre el agua y la roca, y la luz empeñada en acogerse a tus sombras tejidas en el blanco de tus praderas blancas, moteadas de verdes en tus praderas verdes, cargadas de tus flores, todas las flores blancas; y amarillas, y rojas, y moradas, y blancas, así recordaba yo que te respiraba, que crecía sobre mí tu memoria larga, así te miraba yo, que te recordaba, como tú que recuerdas cada luna que pasa, como tú que acunabas con color la mañana.…
Escapaban del viento al correr de la playa y en su huída no buscaban más que hallarse al final, encontrarse al terminar verde el mar de ramas.…
Se encontraron, y sin esperarlo, se miraron evanescentes y sumidos en la negrura.
Una vieja canción desbaratando la bruma del tiempo y la lluvia, del frío y la soledad:
Siempre fueron tus ojos, pensaron al unísono; siempre busqué tus formas y tu voz, murmuraron;
Y en el silencio de sus palabras se acercaron, acezante la noche cuerda en sus latitudes,
Se dejaron llevar hasta tocarse de nuevo, y hasta los gluones se inflamaron de tiempo y rabia.…
Me levanté, anoche, ennegrecido por el sueño, enrojecido por la imagen de un cuerpo extraño extendiéndose en ramajes entre los recuerdos; me levanté y escribí en sintonía frenética, con la noche en feroz arrebato suspendida, todo lo que tu textura rosa y submarina infundía en las corrientes del cuerpo encerrado.…
En la sumisión del tiempo y la certera angustia, en la profunda sensación del verse cercano, construido de nuevo en solitaria realidad.…
Te diluyes como las vetas del mármol rojo, una imagen que en la música ya no circula; te diluyes, de tu silueta escapan los líquidos, y en esa última dulzura catasterizarte, porque te alejes que soy de miedo y tú tan frágil y en las modas de la moral me hallas aprendido.…
Un templo en las cumbres, acunado por los pinos, de sus paredes austeras derrama la vida en las empinadas cuestas que guían las sombras hasta el corazón empedrado de sus estelas.…
Soy pequeño, a veces, tan pequeño que me cuesta encontrar los párpados que me fijen al sueño; más pequeño que esas luces oscuras que adornan el núcleo líquido de la noche rasgada.…
¿Cuántas versiones he visto? Tú, loca del río, cuántos requiebros me han quebrado, viva del alma, dime, en la memoria resuelta del no escardarse en tus ojos nubios de líquidos pareceres… Cuántas risas del sueño, cuántas formas melladas, y el silencio, en tus alientos, y la norma rota creciendo a la puerta de tu soledad bendita; te vi en la Colonia, niña del sur, como nunca te veo en cada noche que, perdida, no mueves ni el saber de las llamas del rocío futuro, ni el dolor de las marcas del destino presente.…
“The hottest places in hell are reserved for those who, in times of great moral crisis, maintain their neutrality.” Dante Alighieri
Miras.…
Duermes, sueñas, y cantas, desde que fuiste sombra, sigues, y desde entonces, entre la noche azul, los trazos remotos de voces antiguas, ricas, reflejo de la vida que antes surcara el fluído que al respirar, trasladas; que pensando, moldeas; que sintiendo en cada hebra, a tu alrededor, levantas.…
Qué si no la noche se cocina en tu cerebro,qué si no el pistilo oscuro de la bestia extraña;escalera de caracol que sola desciendeperdida entre los cenagales del yermo día,efímera en cada oscurecer, breve en el sueño,persistente en la nocturnidad que ata el colorsereno al tomar el control del correr sin más,del dejarse llevar, burlar la arena en los ojos…Qué si no se disfraza en tus brumosas vigilias,qué si no te huye grimosa entre gritos de furia;será que has de apaciguar las iras de la noche,será que aún no dominas de su ritmo, la forma.…
Se muestra la muerte entre las patas de los gatos,viene caminando, sin esconderse del día,que no le hace falta ya ocultar viejas manías,engalanada va, descubriéndose en los pasos
que antes, sumergida, recurría sin vestidos;enseña sus dientes largos, plena en propendía,hambrienta como cuando nada más existía,sólo ella, en el albor de todos vuestros sentidos.…
Dejar volarte a contraluz, como si no hubieraya más rasguño que el de tus ángulos oscuros,que el de las vetas de almagre rayadas a fuegoen los sillares de la memoria titilante;dejar de seguirte y en el asfalto perdersecomo si fuera la última de las lunas rojas,como si fuera que fueses al norte, de nuevo,trepando por los pólipos de la niebla amigasoportando la lluvia con su sabor a cielo,mecerse en juegos, piel con piel, sobre la marañaque anida el mundo y el tiempo, del hoy al mañana,del ayer, en su tremolantes, verdes esperas,al mirarse a los ojos de nuevo, como vivos,como si hubiera de camino al sueño, dos pasos:uno, como niños sin más que la recia noche;dos, como solos, sin nadie, al abrazo entregados.…
En el último latido seco del veranonos dejamos mecer aferrados a los restosdel estío moribundo en su lenta partida,
y arropados por el eco en los montes cercanos,vivimos de nuevo como hiciéramos entoncesen las cumbres oscuras de la clara locura.…
Cayendo la tarde en verano y no estamos todos,donde siempre, sembrado en nuestros ojos el verdede los días de calma en fárfara de viejas piedras;cayendo la tarde y viéndome buscando lejosuna señal, un sonido, la sonrisa, siempre,del sol hinchado y soberbio sobre aguas heladas,del cariño de años sobre la hierba y las arenas,haciendo de noches caminos interminablesentre los brotes de la adolescencia efluyente,a borbotones, como telúricas respuestasa todo lo que criaban calladas estaciones.…
Retumba en las cortinas brillantes de tus ojosun temblor de ritmo lento y muy claro sabor;y en las piezas de ese mundo perdido de besos,fantasmas de piel lamen los rastros del sudor.…
Es una visión horrífica que nos esperacon el alba de los días aún no empezados.
Es un cuervo suspendido del busto de palasgraznando a gritos la furia errática del céfiro.…
Yo no veo a Kavafis como algo exótico, recién descubierto. Para mí Kavafis, gracias a mi padre, estuvo siempre ahí, navegó siempre delante, me ayudó a entender a Odiseo y fue que columpiado en sus maneras, aprendiere amar a Diómedes más que al soberbio mirmidón.…