Estar contigo, una noche;
puede que dos.
Conocerte, aunque tenga que hacerlo de nuevo.
Saberte desde dentro.
Dormirme, y que te duermas.
Despertar al volitivo instinto de la mañana, estática,
distraída.
Volver a mirarnos, desconocidos,
a la distancia de los labios.
Quieto, dejarme llevar,
que me entierres,
que me hagas olvidar.
Volver a mirarnos, conocidos,
ya no más secos,
Nunca más.