Al olor de tus sudores
asperjado, peleado,
con el día que levanta
sueño que ando despertado.
Corro que no voy buscando
nada que me haya guardado
las estaciones de paz
en las que sumo a tu lado.
Asordado por tus muslos
es como quiero encontrarme,
nada de ruidos ni duelos,
de tus ríos someterme.
Templa la cuerda que falta,
reconstruida en esforzame
por andar siempre pegado
a tu pasión por quererme.
Y el candor de tus silencios,
finos, pacientes, activos,
anublados van los miedos
que del asfalto revivo.
Ato versos a randales,
y de los cisnes, pasivos
vigías de nuestra tarde,
filtro notas del sentido.
