Me voy a dormir y te escribo,
¡qué error!
Pero te escribo en español,
lengua que entonces no hablabas,
lengua que hoy sólo atisbas
a través del canto
al que tu naturaleza te obliga.
A pesar de las lluvias,
a pesar de los mares creados
te escribo,
me voy a dormir y te escribo,
guapa,
¿y por qué no?
Será que no, digo,
que no me respondes,
y será no por mis letras,
serán más los años que surcan
las palabras perdidas,
el aliento dejado
en las nubes lejanas del frío…
Será que te escribo y ya está,
que te escribo por ser yo,
¿cómo no?,
que no soy ni digo
si con las manos no te cuento.
Será porque te escribo,
entonces,
¿por qué si no?
Me voy a dormir y te escribo,
fermentando en palabras
los silencios que algún día fueron.
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