No quiero producir, quiero volar,
y dormir, dormir todo lo que pueda;
no quiero verme útil ni eficiente,
ni práctico, ni buen profesional.
No quiero acatar, cumplir, morder,
quiero saborear, ver, respirar,
no quiero ser parte de lo que toca,
no quiero vivir por tener que hacer,
quiero elegir, conocer, decidir,
y aprender a vivir tranquilo, humano
saberme en la profundidad del miedo,
en la cima del tiempo por venir.
No quiero ser eficaz, sino sabio;
no quiero ser inmortal, sino humano;
no quiero ser guapo, listo, perfecto,
quiero vivir cada segundo lento,
quiero sorber el aroma del tiempo,
la insondable infinitud del presente.
No quiero producir, quiero volar,
y no dormir, dormir solo de día,
no dejar de beber azul la noche.
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