Porque era un niño
Siendo niños veíamos las estrellas:
tu las mías y yo… tus estrellas.
Tú mis planetas, los de mis anhelos
más profundos, y yo, tus tierras,
la madurez de sus árboles y plantas,
la de tus mundos ya crecidos;
más que los míos…
Siendo niños me salte el negro
profundo de tus mares y el claro,
límpido, blanco y rosa de tus montes.
Siendo niño no supe apreciar
el arrullo de tus praderas,
que de verdes,
me empujaron más allá de tus esferas.